La primera película de temática homosexual que se llevó un Oscar a casa fue el documental 'The Times of Harvey Milk', en 1984. La intención primaria de su director, Rob Epstein, era contar la historia de 26 gays y lesbianas de todo el país, para retratar las trabas con las que éstos se topaban a la hora de acceder a determinados puestos de trabajo. Uno de ellos iba a ser Harvey Milk, concejal de San Francisco y primer cargo público abiertamente homosexual, convertido en adalid de la lucha contra la ley que impedía a los gays trabajar en el sistema educativo público.
Su asesinato en 1978 a manos de un ex policía y los disturbios que se desencadenaron tras la condena –mínima– que le cayó al homicida cambiarían las tornas. El director decidiría entonces centrarse en el controvertido político, y retratar su vida a través de fotografías y entrevistas.
Al recoger el Oscar, tanto Epstein, el director, como Richard Schmiechen, el productor, aprovecharon el tiempo de los agradecimientos para reivindicar su condición de homosexuales y saludar a sus parejas