La última vez que vi a Kim Cattrall, una de las cuatro heroínas de la ya mítica serie "Sex and the city", me presentó al primer hombre con el que había tenido un orgasmo. Hubo un silencio tenso mientras estrechaba la mano de Mark Levinson, su tercer marido. Hoy, él es uno más en la larga y variada lista de romances de esta británica que pone su carrera primero y a la que no le importa admitirlo. "He estado enamorada la mayor parte de mi vida", dice, "pero ese amor ha sido por mi trabajo".Cattrall está disfrutando fama y fortuna con una cuenta bancaria que va engordando. Y a los 51 años no tiene problemas en revelar los talentos de su joven amante, el chef canadiense Alan Wyse (29). Ya llevan juntos tres años: "Viene de una generación diferente, así que acepta que tengo un trabajo y otra vida". Ciertamente, esta conversación podría salir directamente de un guión de la serie: su personaje, la exitosa devoradora de hombres Samantha Jones, tenía un novio joven, Jerry "Smith" Jerrod (Jason Lewis).
Se vio a Cattrall en los zapatos de Samantha por última vez en 2004, cuando HBO canceló el programa. Ahora regresa en versión cinematográfica y hay expectativas. La première del 12 de mayo en Londres fue una locura y este fin de semana, según EFE, los turistas invadieron Manhattan a la espera del estreno: será el viernes 30 en EE.UU.
La vida de Cattrall se fue en picada cuando terminó la serie. "Fue horrible decirle adiós a un personaje tan genial", dice. Ese final vino acompañado del adiós a su matrimonio con Levinson: "Trabajaba 17 horas diarias y me había distanciado de él". Y a su padre, Dennis, le diagnosticaron demencia: "Ese tiempo es como una imagen borrosa. Yo había estado disfrutando de 'Sex and...' y de pronto todo iba mal".Entonces se mudó a Londres, para interpretar a una paralítica en la obra "Whose life is it anyway?". También aceptó actuar en la obra "The cryptogram", de David Mamet, por US$ 600 a la semana "El dinero de la película de 'Sex and the city' me permite intentar otras cosas", dice.
Cuatro años demoró la negociación para el filme: "Fue difícil", dice ella. En esos años no vio a las otras actrices de la serie (Cynthia Nixon, Kristin Davis y Sarah Jessica Parker), lo que aumentó los rumores de mala relación entre ellas. Cattrall se negó a hacer la película, a menos que le pagaran bien: "Sería una vergüenza no recompensar a los actores que tienen tanto que ver con darle forma al show", explica. Kristin Davis habló de su decepción; Parker dijo "no hay amargura hacia Kim", y Cynthia Nixon bromeó ácidamente: "No tengo nada que hacer gracias a Kim".
Hoy la cinta es una realidad. Cattrall niega problemas con sus coprotagonistas, pero tampoco habla de amistad: "No tiene sentido decir que somos las mejores amigas, porque no lo somos. Pero se sintió como si no hubiera pasado tiempo cuando nos reunimos".
Lo que "Sex and the city" les dio a las mujeres
AMISTADLa serie celebraba el poder y la importancia de las relaciones femeninas. Los personajes motivaron a las mujeres a apoyarse en otras mujeres.
SOLTERÍA
Que fuera representada de forma tan glamorosa por estas cuatro mujeres fue un alivio a la tradición de que las mujeres sobre los 30 ya están fuera del mercado.
SEXO
Siguió el camino de la "Cosmopolitan" de los 70, y reforzó el derecho de las mujeres al placer sexual libre de culpas y de etiquetas peyorativas.
MODA
Los estilos y looks creados para el show por Patricia Field es lo que hizo la serie tan atractiva. Hasta hoy, mujeres piden los peinados y trajes de las actrices.
La película
El guión ha sido guardado bajo siete llaves. Se sabe que parte se centra en la problemática boda de Big (Chris Noth) y Carrie (Sarah Jessica Parker).
Extraido de Diario "El Mercurio" - Chile
