04 setiembre 2005

ELIZABETHTOWN EN VENECIA

El director estadounidense Cameron Crowe ha presentado en la sección "Fuera de Concurso" del Festival de Venecia su último filme, 'Elizabethtown', una divertida comedia con una extraordinaria banda sonora.

'Elizabethtown' cuenta cómo un terrible fracaso comercial y el fallecimiento de su padre pueden conducir al protagonista a la felicidad.

Otro filme que llamó la atención de la crítica internacional fue 'Musikanten', dirigido por el italiano Franco Battiato: la vida de un gran compositor del pasado contada por un músico del presente.

La cinta de Crowe no puede comenzar peor para Orlando Bloom, que interpreta al empleado de una empresa de zapatos que por su culpa pierde cientos de millones de dólares. Cuando está por suicidarse, su hermana le anuncia el fallecimiento del padre de ambos.

A partir de ese momento, las cosas no pueden ir peor y, en efecto, mejoran cuando viaja al funeral, conoce a una azafata encantadora y luego se encuentra con una familia adorable.

Pero la amenaza de lo irreparable sigue presente y sólo se resuelve un segundo antes de que termine el filme.

Tras el autobiográfico 'Casi famosos' (2000) y el surrealista 'Vanilla Sky' (2001, versión del filme 'Abre los ojos' del cineasta español de origen chileno Alejandro Amenábar), Cameron Crowe -nacido en California en 1957- filma una cinta sentimental y entretenida, al mismo tiempo que se mantiene fiel a su vieja pasión por la música, lo que se evidencia por la gran banda sonora que la ilustra.

Después de 'Perdutoamor' (2003), Battiato vuelve a la dirección para narrar el último año de la vida de Ludwig van Beethoven.

Para hacer el rol del famoso pianista y compositor elige a un actor complejo: el escritor, cineasta y divulgador de la psicomagia chileno Alejandro Jodorowsky.

El filme tiene un carácter onírico. La protagonista, una guionista de televisión -Sonia Bergamasco- obsesionada con la música del compositor alemán, se somete a un experimento de hipnosis y da un salto del año 2005 a 1826, la época de Beethoven.

Coguionista de la cinta, junto al autor e intérprete de éxitos musicales como "Centro di gravita permanente", es el filósofo Manlio Sgalambro.