17 enero 2007

La hora de las caras nuevas

La Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood siempre se ha destacado por ser menos académica en su apartado de TV que su gran competidor y "hermano mayor", los Emmy (el hecho de que los 85 electores sean extranjeros juega un importante papel en sus decisiones). Buena parte del atractivo de los Globo de Oro, que este año consagraron al ciclo médico Grey s Anatomy como mejor drama y a Ugly Betty como mejor comedia, es ver qué predicciones deciden contradecir con sus votos y cuán en sintonía estarán con la opinión del televidente norteamericano. En este caso, la respuesta a ambas preguntas es la misma. Bastante.

Tanto Grey s Anatomy como la debutante Ugly Betty -la adaptación de la telenovela colombi
ana Yo soy Betty, la fea - son dos de los ciclos nuevos más vistos en su país, pero su triunfo fue una sorpresa para muchos, dado que se impusieron a series ya consagradas, como Lost y 24 , en el caso de los dramas, y Desperate Housewives y The Office, en el caso de las comedias. La debutante America Ferrera se llevó además el Globo de Oro a la mejor actriz de comedia por Ugly Betty -"el triunfo del sueño americano", según uno de sus creadores- y dejó boquiabiertos a los espectadores, que le tributaron un aplauso similar al que se llevó Alec Baldwin como mejor actor cómico por 30 Rock, donde encarna a un insoportable y pedante ejecutivo de programación televisiva.

Distinto es el caso del triunfo de Hugh Laurie como mejor actor en drama por su excelente retrato de un médico con pocas pulgas y menos paciencia en House y el de Kyra Sedgwick como mejor actriz en la misma categoría por su eficiente pero vulnerable subjefa de policía en The Closer, dos casos en los que es el memorable personaje central el que define y hace trascender dramáticamente a un ciclo del género en el que está enrolado.

La gran estrella de la ceremonia, Helen Mirren, también arrasó en la pantalla chica gracias a su tour de force en Elizabeth I , que se impuso en las categorías mejor miniserie, mejor actriz y mejor actor d
e reparto (para Jeremy Irons). Pero la invasión de ganadores británicos no se detuvo allí, ya que Bill Nighy y Emily Blunt se llevaron el resto de los lauros -mejor actor y actriz de reparto en miniserie y telefilm, respectivamente- por su interpretación de conflictuados padre e hija en el telefilm Gideon s Daughter