"Danny fue el primero del que hablaron tanto porque todo el mundo sabía que era periodista y no agente de la CIA", dijo su viuda en la rueda de prensa que siguió a la primera proyección del filme en la selección oficial, fuera de competición.
Después "hubo muchos más", por eso no es "apropiado" hablar de casos individuales de periodistas secuestrados y asesinados, pues "es un medio para captar la atención de los medios", añadió la periodista y autora del libro "Un corazón invencible", en el que se inspira la película.
Los tiempos "son muy duros" para los periodistas, "pero no sé si verdaderamente nos hemos preguntado qué pasa, por qué vivimos esto. No creo que hayamos abordado aún esta cuestión de manera seria", destacó Mariane Pearl.
Ojalá que este filme "contribuya" a que los periodistas "se pregunten si pueden hacer las cosas de otra manera", agregó.
Resaltó que la cinta "no es sobre nosotros, sobre nuestra familia", ni se hizo para ganar más dinero o para ser " más célebres", sino para hablar de algo que sucede en el mundo. "Por eso permití hacerla", añadió.
Reivindicación internacional
Daniel Pearl, de 38 años, fue secuestrado en enero de 2002 cuando investigaba la actividad de grupos terroristas islámicos en Pakistán y menos de un mes después fue decapitado por sus captores, pese a la campaña internacional y los llamamientos de su esposa, Mariane, embarazada entonces de siete meses, para que lo pusieran en libertad.
Winterbottom, autor de filmes como 'In this world' o 'Camino a Guantánamo', evocó la complejidad de la situación internacional y en particular en esa región del globo, como consecuencia de la reacción de EEUU a los atentados del 11 de septiembre de 2001, y dijo que ha querido mostrar, entre otras cosas, "lo que se siente cuando se está en Pakistán, desde un punto de vista no occidental".
Para Angelina Jolie, su participación en el filme, donde se ve en acción "diferentes tipos de periodismo, incluido el de los paparazzi" sirvió, entre otras cosas, para cambiar su manera "de ver el mundo" y el cine y para saber apreciar ahora a los periodistas "honestos y comprometidos".
Inicialmente reacia a toda adaptación cinematográfica de su libro, en el que intenta no tomar partido e "ir más allá del odio y la amargura de después del 11 de septiembre", Mariane, que había rechazado previamente otras propuestas, tardó un año en dar el sí a Brad Pitt, productor de la película.
"Acepté porque comprendí que éramos dos contemporáneos conscientes de los mismos retos y problemas, de que es preciso actuar según las capacidades de cada cual" y porque sabía que el contenido del libro no concernía a un caso individual, "sino también a él mismo y a mucha más gente", explicó.
Angelina Jolie, la 'Mariane' en el filme, subrayó las razones que ella tendría para odiar, "pero no odia, se negó a agriarse, a llenarse de rabia y mostró otra manera de hacer, de comportarse".
Eso es "impresionante" y "muestra el camino", es una "lección", pues desde los primeros días Mariane fue consciente de que había perdido a su marido, "pero también de que en el mismo mes murieron otras diez personas, todas de Pakistán, a causa de actos terroristas", resaltó.
Mariane posee "un modo de pensar muy evolucionado" y por eso quisimos hacer este filme", agregó Jolie en total acuerdo con su esposo, Brad Pitt, quien, como padre, se pregunta "en qué mundo van a vivir mis hijos" y quiere hacer todo lo que pueda para mejorarlo, aunque sólo sea un poco