17 julio 2006

La vida despues de "Seinfeld"

"La gente me conoce de «Seinfeld» claro. Y Christine tiene las mismas neurosis que Elaine Benes. No fue algo consciente, pero hay cosas que les van a resultar conocidas a quienes veían el programa. Evidentemente, esa cualidad es mía y no de mis personajes: la neurosis es como mi marca registrada", explica Julia Louis Dreyfus sin poder contener las carcajadas.

No es difícil pensar al personaje que la actriz surgida de "Saturday Night Live" interpreta en "The New Adventures of Old Christine" -que Warner estrenará este martes, a las 20, como plato fuerte de su midseason , que comienza - como una versión madura y bastante más desesperada que aquella Elaine que descartaba hombres como pañuelos de papel, aunque el completo desinterés del personaje que la lanzó a la fama por cualquier cosa que no la involucrara directamente ha sido reemplazado por una obsesión que todo lo consume por demostrar al mundo que puede ser una buena madre y, con ello, un "elemento productivo" de la sociedad.

"Lo que más me gusta de Christine es que es una madre muy responsable, pero sumamente imperfecta, y que sus mejores intenciones tienen consecuencias desastrosas que no sabe prever. El programa se trata de eso, de la distancia que siempre existe entre la intención y el resultado", explica la actriz, que acaba de ser nominada al premio Emmy como mejor actriz de comedia por este papel, premio que ella misma anunció por TV la semana última (sorpresa que, explica, "acabó por despertarme del todo" durante la ceremonia realizada durante la madrugada).

Nadie me quiere

Qué mejor muestra de lo difícil que es para Christine recuperarse del golpe a la autoestima que le ha propinado su divorcio que el descubrimiento -en el primer día de colegio de su hijo y delante de una audiencia de ejemplares amas de casa- que su ex marido (Clark Gregg) la ha reemplazado con un modelo bastante más nuevo y menos conflictivo (Emily Rutherfurd), bautizado "la nueva Christine" por su furibunda protagonista, que ve cómo todos sus intentos de proyectar una imagen fuerte e independiente-y conseguir nueva pareja- terminan en un ataque de nervios de antología que, se insinúa, no será el primero ni el último que vea su gran invento: un gimnasio sólo para mujeres que no tienen tiempo de ir al gimnasio.

A contramano de lo que parece una constante entre las actrices de su generación, aterradas porque la obsesión de la TV con la juventud las acerca cada vez más al momento de interpretar un papel "de carácter", Louis-Dreyfus -veterana en robarse series y películas ostensiblemente ajenas- confiesa que hacía tiempo que quería interpretar a una madre, pero que encontrar una comedia que tuviera un punto de vista original sobre los ya transitados dilemas de la maternidad probó ser más difícil de lo previsto. "No había tenido suerte durante más de un año hasta que mi agente me mandó este guión, de Kari Lizer. Me enamoré de él, porque era gracioso, inteligente y parecía haber sido escrito para mí, aunque no lo fue en realidad", dice la actriz, de 45 años, descendiente del marino francés Alfred Dreyfus.

Quebrando la maldición

Luego del fracaso de "Watching Ellie", la "sitcom experimental" que marcó su retorno a la TV luego de "Seinfeld", en 2002 (en la que interpretaba, en tiempo real, a una cantante de cabaret), muchos se limitaron a señalarla como la última víctima de la ya célebre "maldición" que alejó a Jerry Seinfeld de la pantalla y condenó al olvido a los esfuerzos de sus ex colegas Michael Richards y Jason Alexander (el éxito de "Curb Your Enthusiasm", de su creador, Larry David, no es más que la excepción que confirma la regla).

El hecho de volver a intentarlo nuevamente y, sobre todo, con una sitcom tradicional -explica la actriz- no es un temerario intento de tentar al destino incursionando en un género considerado por muchos perimido, sino una cuestión que tiene bastante que ver con su composición de Christine. "No importa cuánto me guste cómo se ven las comedias modernas (y seamos sinceros: son más lindas, casi como una minipelícula) requieren un ritmo de grabación mucho más exigente. Soy una madre que trabaja, tanto dentro como fuera de la pantalla, y no podría sostenerlo a lo largo de 22 episodios: no estaría nunca en casa. Y necesito estar en casa", explica.

La apuesta rindió sus frutos, ya que "The New Adventures of Old Christine" tendrá una segunda temporada. "Ya no hay la misma, digamos, «paciencia económica» para dejar que un programa encuentre su público", arriesga cuando se le pregunta cómo ha cambiado la TV desde el fin del ciclo de Jerry Seinfeld. La actriz está convencida de que aquel programa nunca hubiera llegado a convertirse en el éxito de público y crítica que fue si se estrenara por estos días, los mismos que ven recrudecer los eternos rumores de una reunión del elenco de esa serie.

Y. a pesar de que Louis-Dreyfus creyó que el mejor final para "Seinfeld" era la muerte de sus personajes, reconoce que desearía volver a trabajar con ellos: "Si encontramos un proyecto que funcione con los horarios y compromisos de los demás, bienvenido sea. No hay nada en carpeta, pero no descarto que algún día lo haya." Mientras tanto, la intérprete hace un dramático silencio cuando se le pregunta cuál es el mayor pedido de sus fanáticos: "Que haga el baile de Elaine". Y, con esa inflexión cortante tan propia de Elaine y la vieja Christine como característica del timing cómico de Julia Louis-Dreyfus responde: "Por supuesto que jamás lo haré", para luego tentarse de risa.