La chica de tez de porcelana, 1,63 m de estatura, ronca y con la juvenil muletilla de cerrar cada oración con la frase "You know?" reniega ser la musa de alguien, "sólo agradezco tener trabajo" -dice-, pero está de promoción por la tercera película que protagoniza para Allen, "Vicky Cristina Barcelona" mientras relee decenas de guiones que llegan a su buzón.
"Siempre está el tema de la musa y siempre decimos que no, no de esa forma, no es de esa manera. Pienso que soy lo suficientemente afortunada para ser la joven de la historia, lo mismo que Judy Davis pudo hacer ciertas partes o Dianne Wiest otras", dijo Johansson, de 23 años, en un encuentro con la prensa en Beverly Hills a propósito del próximo estreno de "Vicky Cristina Barcelona".
"Creo, sabes, que Woody al igual que yo, los dos apreciamos cuán maravilloso es trabajar con tus amigos, y es divertido y siempre lo pasamos bien cuando lo hacemos, nos divertimos, nos entendemos", agregó muy desenvuelta, siempre marcando contacto con la mirada en una mesa redonda.
Sin embargo, unas horas antes y evitando la palabra musa, Woody Allen se deleitó detallando cómo fue que apareció Scarlett Johansson en su vida.
"Fue un accidente", confesó el director de "Manhattan" al revelar que para "Match Point" (2005) había dado el papel a Kate Winslet, quien a última hora se bajó del plan porque necesitaba pasar más tiempo con sus hijos, "algo que entendí", apuntó el cineasta.
Johansson "tenía sólo 19 años entonces. Pero no sabía si era realmente lo que yo había escrito. La contraté y quedé completamente cautivado por ella. Ella simplemente puede hacer todo. No es sólo bella sino también brillante, divertida, encantadora y dotada".
"Nunca he pensado en términos de escribir algo para alguien", dijo el director de 73 años, pero admitió que siempre la tendrá en cuenta y le encantaría que ella estuviera siempre disponible para sus papeles.
"Scarlett es capaz de todo. Si necesitas drama, es dramática, si necesitas risas, puede darte una risa. Ella puede cantar si lo requieres, es sexy, es inteligente. Ella es un gran as, y hay muchas cosas que ella puede hacer (...) Es paralizantemente fotogénica", apuntó Allen sobre la joven que también dirigió en "Scoop" en 2006.
En "Vicky Cristina Barcelona", Johansson encarna a Cristina, una joven apasionada que le gusta arriesgar sentimentalmente, en evidente contraposición a su amiga, Vicky, en la piel de Rebecca Hall, que apuesta por lo seguro con mucho miedo a poner en juego su estabilidad ante el arribo de un amor insospechado.
Esta comedia que intenta mostrar la capital catalana como romántica tiene como co protagonistas a los españoles Javier Bardem y Penélope Cruz, con quienes se arma un trío que ha llevado ya a algunos críticos estadounidenses a calificar la cinta como una de las más sexys y sensuales en la carrera de Allen.
"Es divertido, porque la gente es demasiado conservadora, o sea, es sorprendente (...) Estos personajes se enamoran y es eso, sabes, la gente se enamora e intima", comentó la actriz de "Perdidos en Tokio" sobre las reacciones en la prensa a algunas escenas fogosas en la obra donde Barcelona aparece como una tarjeta postal de sus lugares más turísticos.
Este año estará de nuevo en pantalla con una película de Frank Miller "The Spirit", prepara la dirección de uno de los segmentos de "New York, I Love You" y tiene en agenda al menos tres proyectos más como actriz.
"Siempre me siento afortunada de tener empleo y que un director (como Allen) te celebre, que me vea para cualquier papel; como actriz ése es el mejor halago", dijo Johansson, vestida juvenil, apenas maquillada y con una frescura que no logra opacar ese aire a las antiguas divas del cine