Mientras que la mayoría de las chicas de Dancing Elk están actualizando su página de MySpace o de compras en el centro comercial, Juno es una adolescente de Minnesota, aguda como un puñal y que vive de acuerdo con sus propias reglas. Una tarde típicamente aburrida se transforma en algo exactamente opuesto cuando Juno decide mantener relaciones sexuales con el encantadoramente sencillo Bleeker (Michael Cera).
Enfrentándose a un embarazo imprevisto, ella y su mejor amiga Leah (Olivia Thirlby) urden un plan para encontrar al niño que Juno trae de camino la perfecta pareja de padres por gentileza de la sucursal local de Penny Saver. Fijan su mirada en Mark y Vanessa Loring (Jason Bateman y Jennifer Garner), una acomodada pareja de las afueras que desean adoptar a su primer hijo.
Por suerte, Juno goza del apoyo de su padre y su madrastra (J.K. Simmons y Allison Janney). Después de la sacudida inicial que supone el enterarse de que su hija ha estado sexualmente activa con el improbablemente “viril” Bleeker, la familia se une para ayudar a Juno. Papá Mac acompaña a Juno a evaluar a los posibles padres adoptivos, a fin de asegurarse de que no sean una pareja de “primates” mientras que la madrastra Bren proporciona apoyo emocional cuando Juno combate con los prejuicios que acompañan al embarazo de una menor.
A medida que Juno se acerca más y más a la salida de cuentas, el revestimiento de la idílica vida de Mark y Vanessa comienza a dar señales de estar agrietándose. Mientras que el otoño se vuelve invierno y el invierno se transforma en primavera, los cambios físicos de Juno reflejan su crecimiento personal. Con un intrépido intelecto muy alejado de la habitual angustia adolescente, Juno resuelve sus problemas de frente, exhibiendo una juvenil exhuberancia tan aguda como inesperada