13 mayo 2009

El festival más tradicional rejuvenece gracias a la arremetida del 3D

No es un sacrilegio conjugar "película animada" y "Festival de Cannes" en una misma oración. El mejor certamen del mundo ya ha incluido en su historia titulos como "Bambi" o "Shrek" como parte de su parrilla. Pero el hito que marca "Up", la nueva película de Disney Pixar, es el espaldarazo de los franceses hacia una nueva tecnología como el 3D, que está cumpliendo su promesa de cambiarlo todo.

Ayer, durante la acreditación de los más de 4.000 periodistas de todo el mundo, muchos especulaban si un smoking sería capaz de combinar de modo sobrio con los gruesos lentes 3D que los mil asistentes a la sala del Palais des Festivals deberán usar para apreciar la historia de un anciano que viaja a Sudamérica, gracias a cientos de globos que sostienen su casa por los aires.

Hace dos años el festival mostró en una pequeña sala la película "U2: 3D" del grupo irlandés U2. Pero esto es completamente diferente. Y mucho más grande. Además de ser el casi único arribo de Hollywood a la Croisette, este respaldo a una nueva tecnología que parece ser la única solucion contra el pirateo tendrá los mismos honores en la alfombra roja de los que puede jactarse el más intelectual de los cineastas.

Producida por el genio de Pixar -y ahora de Disney- John Lasseter y dirigida por los guionistas de "Wall-E" y "Buscando a Nemo", "Up" tiene las apuestas a su favor: se dice que esta apertura no tendrá nada de bochornoso en comparacion con la de "El código Da Vinci" o con la de otra partida hollywoodense como "Indiana Jones y el templo de la calavera de cristal". "Sólo soy un nerd de Minnesota al que le gusta dibujar caricaturas, así que el hecho de que vamos a Francia a ser parte de este festival de renombre internacional es un tanto increíble", dijo ayer Pete Docter, director de "Up", antes de partir a Cannes.

La apuesta tecnológica del festival no es sólo 3D: todas sus salas de cine han sido renovadas con proyectores digitales y se espera que las funciones en ese formato este año se tripliquen. Porque, si bien este 2009 hay crisis financiera, la idea no es que Cannes baje sus números. Y, aunque los expertos del Mercado del Cine, de la organización y los críticos pronostican que habrá bajas, menos ganancias y menos negocio, el espectáculo que parece ofrecer el 3D en el glamoroso concierto de la Riviera Francesa ayuda a olvidar por un rato asuntos como la cesantía o la influenza humana: la evasión en un lugar evasivo es, simplemente, bienvenida.

En ese sentido, el hotel Carlton es gran ejemplo: gigantografías de futuros estrenos como "Transformers: La venganza de los caídos" y la misma "Up" tapan la bella fachada de este edificio neoclásico que parece una paleta publicitaria gigante o tal vez el frontis de una especie de jardín infantil VIP, con "monitos". Aunque hay que excusar del montón a "Up": hoy se verá si esta primera película animada y 3D que abre Cannes anima las cosas en la Riviera Francesa.

Con el cinturón apretado

Puede ser porque la presencia de Hollywood en la selección oficial es mínima e inexistente en la competencia. O simplemente porque la crisis económica también se sintió en el festival más importante del mundo. El asunto es que este año los expertos hablan de un Cannes marcado por la austeridad.

Las calles ya están empapeladas de afiches promocionales, pero en la trastienda expertos aseguran que la inversión publicitaria ha sido menor este año en comparación a ediciones anteriores. El presidente del sindicato hotelero de Cannes, Michel Chevillon, aseguró también que la ocupación ha bajado en un 10%. La revista Vanity Fair canceló su fiesta anual en el Hotel Eden Roc, y la demanda por espacios para yates de lujo en La Riviera -histórico escenario para eventos glamorosos- también ha disminuido