07 mayo 2005

LA HORA DE TONI COLETTE


Toni Colette en "The Muriel's Wedding" Posted by Hello

La protagonista de La Boda de Muriel era una linda e ingenua chica excedida de peso según los cánones actuales. Quería casarse a toda costa y disfrutar de un mundo que pudiera ser tan perfecto como una canción de ABBA. Enfundada en ropa brillante y emulando a la rubia del grupo sueco, Muriel hacía una coreografía de Waterloo (primer éxito de ABBA) en una isla paradisíaca. La actriz que personificaba a Muriel era australiana como la película y se llamaba Toni Collette.

Antes de La Boda de Muriel (The Muriel’s Wedding - 1994), Toni había actuado en teatro y en pocas películas y había ganado algún premio en Australia. Siguió trabajando en varios films en su país y también en Hollywood (entre ellos dos con Gwyneth Paltrow, Emma y El funebrero), pero cuando leyó el guión de Velvet Goldmine supo ver allí su segunda gran oportunidad y quiso ser parte de ese proyecto.

Llamó a Todd Haynes y le dio un encendido discurso acerca de cuán necesario era que ella obtuviera el papel de Mandy Slade. Cuenta Toni que en los días posteriores a la entrevista con Haynes estaba sumamente ansiosa y, mirando al cielo, pidió ver una confirmación celestial de que conseguiría el ansiado papel. Acto seguido, pasaron siete estrellas fugaces, un hecho más que acorde con la película en la que participaría. En Velvet Goldmine (1998) Toni interpreta a Mandy, pareja de Brian Slade y partícipe en la generación de una Londres de multisexo, drogas y glam rock. Mandy es flaca y es la contracara hard de Muriel.

Al parecer, el rodaje de Velvet Goldmine fue una fiesta continuada de alto voltaje y Toni estuvo bastante desatada. Entre toda la agitación, proyectó su papel a la realidad y tuvo un noviazgo con Jonathan Rhys Meyers (Brian Slade).
La actuación de Toni como Mandy fue ampliamente elogiada y le permitió dar otro brillante paso al participar en Sexto sentido (1999) en el rol de la madre y estar, otra vez, maravillosa, creíble, emocionante. Hollywood se fijó en ella y la nominó a mejor actriz secundaria por la madre de un niño que ve fantasmas.

Fue encantadora y trágica como la madre suicida de un niño en About a Boy (2002), junto a Hugh Grant, para luego convertirse en una corista travesti en Connie and Carla (2004), pero no nos olvidemos del beso que se dio en pantalla junto a Julianne Moore en The Hours (2003).

Además de poseer una belleza arrolladora -de la que soy uno de los primeros admiradores porque la aprecio desde La Boda de Muriel-, Toni tiene el mayor carisma femenino actual y siempre logra que nos enamoremos de sus personajes. Ahora falta verla en la última película de Curtis HansonIn Her Shoes – donde actuará junto a Cameron Díaz y Shirley McLaine.