Presentar los estilos de moda del año próximo en la película, un tema crucial para el mundo que describía la serie, no fue nada fácil. "Hablamos con alguna gente de la moda y de las revistas, gente soltera que no tiene problemas con la bebida y en cuyos testimonios no se puede confiar", dijo Parker, que ha sido productora desde la primera temporada de la serie.Los resultados: los lugares grandes y atestados ya no se usan, ahora lo íntimo es lo que vale. El equipo de Sex and the City filmó en lugares clásicos de Nueva York, como el hotel Carlyle y Raoul s, el bistró del SoHo. Y en la película habrá estaciones, a diferencia de lo que ocurría en la serie, que transcurría en lo que King llama "una eterna primavera". En este caso, el film ocurre durante un año completo, con sus consiguientes estaciones.
Lo que nos lleva a la ropa. Parker empezó las pruebas para el rodaje en agosto último, justo antes de la Semana de la Moda, para los cerca de 80 cambios de vestuario que tiene en el film. Pero para el momento en que se estrene la película, la versión de esta temporada de las hebillas de flores que la diseñadora Patricia Field hizo famosas hace unos años estará completamente pasada de moda.
"Para conseguir la moda primavera-verano de 2008, hubo que implementar una estrategia de negociación -dijo Parker-. Conseguíamos que nos prestaran ropa por, digamos, unas cuatro horas y después aparecía alguien de Yves Saint Laurent que me desvestía y se la llevaba de vuelta."Parker es una productora activa en el film ("me gusta sentirme responsable por la gente", dijo), pero también es lo suficientemente actriz como para no querer mirar el resumen diario del rodaje y asegurarse de que haya filtros suavizantes en las lentes de la cámara (hay pocas arrugas, tanto en la vida real como en la pantalla)
