06 diciembre 2006

Audrey Tautou no quiere ser una estrella internacional

La actriz francesa Audrey Tautou, cuya última película ('Hors de prix', dirigida por Pierre Salvadori) se estrena la próxima semana, no tiene ganas de convertirse en una "estrella internacional", tras haber participado recientemente en la superproducción estadounidense 'El código Da Vinci'.

En una entrevista concedida a la AFP, la actriz, célebre por su papel protagonista en 'Amelie', indicó que ha decidido "hacer una pausa" en las próximas semanas, tras un periodo de trabajo intenso. Con su aspecto frágil y su mirar aterciopelado, Audrey Tautou, de 28 años, sigue siendo para buena parte del público Amelie, la fantasiosa heroína de la película de Jean-Pierre Jeunet, cuya mirada traviesa dio la vuelta al mundo.

"Fue hace cinco años, pero en el extranjero mucha gente me conoce todavía gracias a esa película. Me encanta haber actuado en un filme de culto, pero es verdad que en un momento dado tuve una pequeña sobredosis", dice. En "Hors de prix", una comedia romántica, comparte cartelera con Gad Elmaleh. Su personaje, Irene, es "una mujer que utiliza sus encantos para seducir a los hombres acaudalados, de cualquier edad, y tratar de que se casen con ella".

"Este personaje me enseñó lo que es una mirada masculina hacia una mujer más sensual que mis otros personajes", dice Tautou, que considera que "es genial poder interpretar a una mujer fatal y escenas de comedia divertidas". Después de "Hors de prix", que será estrenada en Francia el próximo miércoles, Audrey Tautou actuó en "Ensemble c'est tout" (Juntos, es todo), adaptación de una novela de Anna Gavalda por el cineasta Claude Berri.

"Como he trabajado mucho, he decidido hacer una pequeña pausa", indicó. Cuando se le pregunta sobre su futuro, la actriz enarca las cejas y exclama: "Oh la la, jamás he tenido un plan de carrera. De todos modos, eso no funciona". "Yo no preveo nada, no tengo ni ideas ni ganas de hacer algo en particular. Tengo una actitud muy pasiva con la profesión. No trato ni de cambiar mi imagen ni de demostrar nada", dice, resumiendo: "En todo caso, no considero que el cine sea toda mi vida".

Desde que obtuvo el César de la mejor revelación por su papel en "Vénus beauté" de Tonie Marshall, en 1998, Audrey Tautou, que ha trabajado a las órdenes de Stephen Frears ("Dirty pretty things"), Amos Kollek ("Happy end"), y compartido cartelera con Tom Hanks en "El código Da Vinci" de Ron Howard, no mantiene los pies sobre la tierra y no se plantea hacer carrera en Estados Unidos.

"No tengo ganas de trabajar allí si es para interpretar papeles de francesa tonta en películas idiotas", afirma. La actriz ignoró la mala acogida que tuvo "El código Da Vinci", presentada en la apertura del Festival de Cannes. "Soy una persona bastante sensible, esas cosas o me preocupan o me irritan, de manera que no vi, ni leí, ni escuché nada", sostiene.

Hay cineastas con los que le gustaría trabajar, pero Audrey Tautou no los nombra porque es "supersticiosa". Y además "por orgullo": "Tendría miedo de que dijeran '¡Mira, Audrey Tautou quiere rodar conmigo, qué horror!"