Robert Lowe es un hombre de carrera errática. Su camino incluye desde un papel en una película de Francis Ford Coppola y un protagónico con Jacqueline Bisset hasta roles menores en películas clase B y el escándalo de un video en el que aparecía teniendo sexo con una menor.La infancia de Robert Hepler Lowe —tal es su nombre completo— fue normal. Nació el 17 de marzo de 1964 en Charlottesville, una ciudad de 20 mil habitantes del estado de Virginia, EE.UU.
Pronto, su familia se trasladó a Ohio. Allí comenzó su carrera como actor y, era inevitable, como modelo. Antes de cumplir 15 años, había protagonizado más de 30 obras y varios comerciales de gráfica y televisión.
Al mismo tiempo, en el Santa Monica High School, se hacía amigo de dos pibes que luego se harían famosos: Sean Penn y Emilio Estévez.En los 80, antes de cumplir 20 años, llegó la gran fama. En 1983, Francis Ford Coppola lo convocó para Los marginados, una película basada en la famosa novela de S.E. Hinton. En el mismo filme, participaba un jovencísimo Tom Cruise.
Ese mismo año, también llegó Clase, en la que se enamoraba de la madre de un compañero de colegio. La señora en cuestión era Jacqueline Bisset. A esa altura, Robert Lowe ya tenía una impronta: en las películas, era el chico lindo, que siempre enamoraba a las mujeres más lindas. Nacía en Hollywood un nuevo galán. Con ese sello, llegaron Oxford Blues, El Hotel New Hampshire y ¿Qué pasó anoche?
Como las modelos que reniegan de su belleza y repiten eso de soy más que una cara bonita, Lowe dio un volantazo en su carrera y comenzó a elegir otros papeles, con personajes más complejos y menos mimosos.
En Square Dance (también conocida como Enséñame a bailar), se despachó con un personaje jugado: un retrasado mental que conocía a Winona Ryder. Y, sin poder zafar de su designio de galán, la enamoraba.
A fines de los 80 —forma parte, al igual que Tom Cruise, de la generación de actores surgidos en esa década—, Lowe cayó en desgracia. Se conoció un video en el que mantenía relaciones sexuales con una menor de edad. El actor seducía a jóvenes y las invitaba a participar en una falsa película porno; incluso, grabó algunas escenas mientras asistía a la Convención Demócrata. La condena en la Justicia fue benévola: 20 días de servicios comunitarios en la localidad de Dayton. Además del escándalo sexual, los excesos de alcohol y drogas lo alejaron del mundo del espectáculo. Sin embargo, nada le impedía continuar con su agitada vida amorosa, que incluyó a estrellas de Hollywood y una fugaz historia de amor con la princesa Estefanía de Mónaco, que sólo duró seis semanas.
A inicios de los 90, ya con un perfil más bajo, se casó con la maquilladora Sheryl Berkoff, con quien tuvo dos hijos. De a poco, fue reconstruyendo su carrera, aceptando papeles pequeños en obras de teatro y en ciclos de TV.
En 1999, pisó fuerte en la televisión con The West Wing, la serie protagonizada por Martin Sheen, en la que Lowe interpretaba al ayudante de comunicaciones de la Casa Blanca. Ahora, se lo puede ver en Brothers & Sisters, la serie que hace referencia al terrorismo, luego del 11 de setiembre de 2001.Y el ex chico lindo y actual padre de familia no se arrepiente de nada.
"No estaría donde estoy si no me hubiera equivocado. Llevo 17 años sobrio. Todavía soy el rebelde que era, pero de una manera diferente. Ahora vuelco todo en mi trabajo", dijo en una reciente entrevista el ex chico díscolo de los '80 y actual padre de familia