De título Nueve vidas, la cinta se estrena el 14 de octubre en Nueva York y Los Angeles, y está construida en torno a las experiencias de nueve mujeres, protagonizadas por actrices tan prestigiosas como Glenn Close.
Las historias, de carácter personal, están narradas a la manera de cuentos cortos que tienen como hilo conductor el confinamiento de las relaciones humanas, y cuyos protagonistas reaparecen en otros episodios pero como personajes secundarios.
"Siempre me han interesado los personajes que están atrapados en una situación, que no pueden zafarse de una persona porque son cautivos de una relación", dijo García.
Nueve vidas responde a la urgencia de García de volver a hacer cine tras años de trabajar en televisión y de filmar en 2000 su primer largometraje conocido en chile bajo el título Con sólo mirarte.
Su ópera prima tuvo la misma estructura de esta segunda película: historias personales, en aquel caso de cinco mujeres.
"Le tenía terror a la idea de que no dirigiría de nuevo. Pienso que este formato me permite hacerlo de forma barata y rápida. Se trata de una película de bajo presupuesto y filmada en tiempo real y con un sólo día de ensayo para cada actriz", señaló el hijo del Premio Nobel colombiano.
Nueve vidas se hizo en 18 días, nueve para ensayar y nueve para filmar, y contó con un presupuesto mínimo; la mitad del equipo técnico eran estudiantes de cine y, como si se tratase de teatro, cada una de las nueve tomas se hizo de una sola vez.
"Mis películas son recetas para no conseguir financiación: no tienen una estructura tradicional, no tienen un protagonista en busca de un objetivo o un personaje principal masculino o joven, no hay sexo, no hay violencia, no hay un final feliz. Eso hace más difícil encontrar financiación, pero no es imposible" indicó Garcia, que se ha ganado la admiración de sus actrices.