Clementine y Joel, locos de amor
Joel (Jim Carrey) queda asombrado y aturdido al descubrir que su enamorada Clementine (Kate Winslet) se ha borrado de la memoria los recuerdos de su tumultuosa relación.
Desesperado, contacta al Dr. Howard Mierzwiak (Tom Wilkinson), el inventor del procedimiento, para borrar a Clementine de su memoria. Pero a medida que los recuerdos de Joel desaparecen paulatinamente, él comienza a descubrir nuevamente su amor por Clementine.
Desde la profundidad de su cerebro, Joel intenta escapar el procedimiento. Mientras que el Dr. Mierzwiak y sus colaboradores (Kirsten Dunst, Mark Ruffalo, Elijah Wood) lo persiguen a través del laberinto de sus recuerdos, es cada vez más obvio que Joel no puede, ni quiere olvidarse de Clementine.
Lo que puedo decir de este filme es que más allá de la brillante propuesta narrativo/visual –comparable a la puesta en imágenes desde dentro de la cabeza de John Malkovich en la cinta de 1999—, Eterno Resplandor… me entusiasmó por una razón más de fondo: el hecho de que esta cerebral película resulta, al final, un sorpresivo –por lo inesperado—alegato a favor del amor. Así, cuando uno termina de ver la cinta, dan ganas de ir con nuestra media naranja para abrazarla, darle un beso y decirle, emocionado: “A veces no te soporto, pero no puedo vivir sin ti”. ¿Se le ocurre a usted una mejor declaración amorosa? .