31 enero 2010

"Invictus"

Al filo de los ochenta años, Clint Eastwood es uno de los últimos cineastas clásicos. Respaldado por un amplio consenso, lógico, de que sus películas, aun las menos inspiradas, tienen un nivel respetable. Es el caso de Invictus (respetable, pero poco inspirada), en la que retoma el prejuicio racial, el odio y la venganza, como lo había hecho en su anterior trabajo, Gran Torino, aunque a través de un enfoque totalmente opuesto: con predominio de la épica, los mensajes ampulosos y los personajes previsibles, que en este caso son reales y conforman una especie de biopic con mezcla de epopeya deportiva. Nelson Mandela (Morgan Freeman) y Francois Pienaar (Matt Damon), capitán de Los Springboks, selección de rugby de Sudáfrica, organizador del Mundial de 1995.

Invictus empieza con Mandela recién llegado al poder -tras haber estado 27 años en prisión- en un país dividido por los efectos del apartheid (representado, en la secuencia inicial, por una partido de fútbol entre negros y uno de rugby entre blancos, rejas de por medio). Freeman se muestra natural y solvente, aunque en este tipo de papeles -personaje histórico encarnado por actor ultrafamoso- el espectador termina juzgando la capacidad de mímesis más que la creatividad interpretativa.

Algo similar ocurre con la inevitable comparación entre los hechos reales y su "traducción" ficcional: otro elemento distractivo de lo puramente cinematográfico. El Mandela de
Freeman, a pesar de su soltura, es un Mandela para la canonización. Muchos lo justifican sosteniendo que el verdadero es y fue exactamente así. No importa. El problema es que el tratamiento canónico de un personaje lo torna unidimensional, tedioso, carente de nervio. El protagonista de Invictus, más allá de su soledad personal, casi carece de contradicciones; puede generar admiración y respeto de prócer, pero no empatía.

El nudo de la historia, narrada con fluida sobriedad, es la necesidad de apoyo (esquivo, por parte de la mayoría negra) a Los Springboks en el Mundial. Y la búsqueda de un resultado que "unifique" al país. El Mandela versión
Eastwood, a pesar de sus padecimientos pasados, opta por la tolerancia, el perdón y, tal vez, el olvido (posición al menos discutible). Pienaar -un correcto Damon- arrastra los prejuicios de su familia blanca, pero recibe y comprende y se motiva con la "lección de tolerancia".

Es sintomático que la subtrama más interesante, la más tensa, la menos subrayada, sea la que enfrenta a personajes anónimos: a los custodios blancos y negros de Mandela. El resto es una historia (la Historia) filmada con procedimientos correctos, rematada en escenas deportivas logradas aunque grandilocuentes, que avanza hacia lo que presagiamos, imaginamos o, peor, conocemos

29 enero 2010

Las mujeres que brillan gracias al encanto de George Clooney

Sin dudas que este fue un gran inicio de año para Anna Kendrick y Vera Farmiga. Las dos actrices que acompañan a George Clooney en la nueva película de Jason Reitman (Juno), "Amor sin escalas" -que ya se encuentra en las salas de cine de nuestro país- han dominado en las ceremonias de entrega de premios de esta temporada, además de haber encantado a la crítica con sus papeles.

De sólo 24 años, Kendrick se ha convertido sin lugar a dudas en una de las revelaciones del último tiempo. Gracias a su rol de Natalie -una joven que llega a transformar el sistema de trabajo de Clooney-, ha recibido más de 10 nominaciones a diferentes galardones. Y a pesar de que Mo'Nique le arrebató la estatuilla de los Globos de Oro, el resto de la crítica la ha favorecido, y hoy es una las candidatas a ganar los británicos premios Bafta. Además, su nombre suena fuerte para los Oscar.

Su carrera cinematográfica comenzó en 2003 con la comedia musical "Camp", del director Todd Graff. Sin embargo, su trabajo más conocido es su rol en la saga de "Crepúsculo", como una de las amigas del instituto de Bella.

Pero los inicios de su carrera estuvieron marcados por el teatro, ya que con sólo 12 años se convirtió en una de las intérprete más jovenes nominada a un premio Tony, gracias a su participacion en la obra de Broadway "High Society".

Por su parte, Vera Farmiga pasó una década sólo con papeles secundarios en películas taquilleras, por lo que al lado de Clooney está consiguiendo el salto al estrellato que le fue esquivo por tanto tiempo.

La actriz de 36 años, también ha sido alabada por su rol y nominada a numerosos galardones gracias a su papel de Alex, una atrevida ejecutiva que viaja por el país.

Durante su carrera ha compartido escena con connotados actores como Leonardo DiCaprio y Matt Damon en "Los Infiltrados" (2006), y con Robert De Niro en el thriller "15 minutos" (2001).

Sin embargo, también ha incursionado en distintos géneros, como el terror, con "La huérfana" (2009) y el drama, con "El niño con el pijama a rayas" (2008).

13 enero 2010

Final de Lost será un "cóctel de respuestas y misterios", según su productor

La última temporada de la serie de televisión "Lost" será un "cóctel de respuestas y misterios" que pondrá fin de forma definitiva a las historias de los náufragos de la extraña isla, afirmó ayer el productor ejecutivo del programa, Carlton Cuse, en un evento organizado en Los Ángeles.

Aunque los creadores de la serie que en nuestro país emite el canal por cable AXN, aseguraron tener claro cómo concluiría la historia casi desde sus inicios, todavía quedan detalles por decidir y siete capítulos por grabar.

"El final aún no está escrito", comentó Cuse, quien explicó que pese a que "hay cierta variedad de elementos mitológicos que están definidos", mucho de lo referente a los personajes se irá perfilando sobre la marcha.

Cuse fue uno de los miembros de la serie que participó en el acto de presentación de las novedades de la temporada de invierno del canal de televisión ABC, la cual emite "Lost" en Estados Unidos.

En él también estuvieron el co-creador del programa Damon Lindelof y los actores Emilie de Ravin (Claire), Michael Emerson (Ben), Jorge García (Hurley), Josh Holloway (Sawyer), Daniel Dae Kim (Jin), Evangeline Lilly (Kate) y Terry O'Quinn (Locke).

La expectación generada por el final de esta serie, seguida por decenas de millones de espectadores en todo el mundo durante sus anteriores cinco temporadas, se dejó notar en la rueda de prensa en la que se sucedieron preguntas que buscaron, sin demasiada suerte, alguna pista sobre cuál será el desenlace del programa, algo que ni los propios actores parecen saber.

Lindelof señaló que el reparto recibe los guiones de cada capítulo poco antes del rodaje y sólo se les facilita la información necesaria para realizar su trabajo, sin entrar en detalles profundos sobre el devenir del argumento en el futuro.

"Trabajando en esta serie es mejor no saber nada, no cargar con los secretos", confesó Emerson, ganador de un Emmy por su interpretación de Benjamin Linus el guión de los sobrevivientes a un accidente aéreo.

Durante su temporada de despedida, Lost guardará especial relación con sus capítulos iniciales, hasta el punto de que Cuse afirmó que, con haber visto la primera temporada, se podrá seguir lo que ocurre al final, lo que hace presagiar un relato menos intrincado que el que caracterizó al programa durante el pasado año.

"Estamos haciendo algo distinto que no requiere tanto conocimiento para seguir la serie", dijo Cuse a lo que Holloway añadió que el arranque será tan intenso como los últimos capítulos del ciclo anterior.

La serie regresará a las pantallas el 2 de febrero en EEUU y una semana después lo hará en Chile, a través del canal de pago. El último episodio, en tanto, está programado para mayo.

"Hemos tenido mucho tiempo para pensar y no tenemos excusas para decir otra cosa que no sea que éste es el final que queríamos hacer", indicó Lindelof, quien, a pesar de todo, espera reacciones muy polarizadas entre los seguidores del programa sobre la forma de terminar. De otra manera, comentó, "no sería 'Lost'".

"Algunas preguntas particulares no quedarán resueltas, tampoco queremos quitar el misterio que rodea a la serie explicando con detalle cada cosa, eso sería un error. Será un coctel de respuestas y misterios, con algunas sorpresas", dijo Cuse, que insistió en que "no habrá secuelas".

Los actores coincidieron en afirmar que existe una sensación de nostalgia a medida que se acerca el adiós de la historia, una experiencia que ha sido muy "intensa", en palabras de Lilly quien declaró que llorará "como un bebé cuando termine".

11 enero 2010

Joseph Gordon-Levitt El nuevo príncipe del cine independiente

Parecía destinado a ser ídolo juvenil. Se puso por primera vez frente a una cámara a los siete años y a los 15 se convirtió en estrella de TV, en el rol de un anciano extraterrestre atrapado en el cuerpo de un adolescente en la exitosa sitcom "3rd rock from the sun". En cine debutó en la comedia infantil "Beethoven" y también participó en cintas comerciales como "Halloween: H20" y "10 cosas que odio de ti". En 2001, se alejó de Hollywood y dejó trunco lo que prometía ser un salto meteórico al estrellato. Pero, casi una década después, regreso.

Joseph Gordon-Levitt no se convirtió en figura para adolescentes. Sin embargo, a los 28 años, es uno de los más respetados y cotizados talentos jóvenes del cine independiente estadounidense. Su último éxito se llama "(500) días con ella".

La cinta muestra la relación -complicada, alegre, triste, crítica y tempestuosa- que tienen durante 500 días Tom Hansen (Gordon-Levitt) y Summer Finn (Zooey Deschanel). Dirigida por Marc Webb, está nominada a dos Globos de Oro (uno para el propio Joseph), tres Independent Spirit Awards y ha ganado el premio al Mejor Guión del National Board of Review y de las asociaciones de críticos de San Diego, Las Vegas y Florida, entre otros.

En 2001, con el fin de "3rd rock from the sun", Gordon-Levitt se mudó de su California natal a Nueva York para ingresar a la Universidad de Columbia. Durante tres años estudió historia, literatura y poesía francesa. Su regreso a la actuación, en 2004, tuvo dos condiciones: nada de televisión y su compromiso con involucrarse en "buenas" películas. El resultado estuvo en su aterrizaje definitivo en el cine independiente. Lo aplaudieron en "Mysterious skin", "Brick" y "Miracle at St. Anna". Tuvo un fugaz (y fracasado) paso por los grandes presupuestos en la abucheada "G.I. Joe: El origen de Cobra" y está dispuesto a intentarlo de nuevo con la esperada "Inception", de Christopher Nolan ("Batman: El caballero de la noche"), que es protagonizada por Leonardo DiCaprio.

10 enero 2010

Las caras ocultas del multifacético "Dr. Parnassus"

Harry Gilliam obtuvo su primer reconocimiento como artista del graffiti cuando era niño, rayando las paredes de la casa de Londres de su padre, Terry. "Mi madre siempre se enojaba conmigo, pero mi papá lo amaba por ser una expresión artística. Así que él siempre estaba muy orgulloso", dice.

Harry Gilliam ha seguido enorgulleciendo a su padre creando dos graffitis para la película de su padre "El imaginario mundo del Dr. Parnassus". A los 21 años, es un veterano del graffiti. Desarrolló un interés en el manga y en el animé a los 5 años, tomó su primera lata de spray a los 11 y eventualmente adoptó su nombre de grafitero, "Voice One".

El artista dice: "Para 'Dr. Parnassus' hice lo que yo considero es uno de mis mejores trabajos. Era enorme, puse muchos personajes de la película alrededor, científicos locos y viejos desquiciados, para que se mantuviera dentro del tema de la cinta. Estaba muy emocionado de verlo en pantalla grande".

"La otra pieza que hice está en una escena entre Parnassus y Mr. Nick y está justo detrás de ellos", dice. "Con simples letras cúbicas V-O-I-C y puse una gigantesca cabeza de mono y agregué las letras E-O-N-E en sus dientes. Me gusta poner letras en dientes. Las películas de mi papá suelen ser salvajes y locas. Y los monos son salvajes y locos: corren por todas partes y se lanzan bananas entre ellos".

Lily Cole, el descubrimiento

Aunque "El imaginario mundo del Dr. Parnassus" será conocida como la última película del actor Heath Ledger -y en la que, tras su muerte, tuvo que ser reemplazado por Johnny Depp, Jude Law y Colin Farrell-, es posible que algún día también sea recordada como el primer papel importante de Lily Cole. La británica de 21 años ya es una de las modelos top más famosas del mundo desde que fue descubierta a los 14. Con sus llamativos y grandes ojos, su diminuta boca, piel de porcelana y cabello rojo brillante, en ella hay algo etéreo, casi extraterrestre. Una rareza que el director Terry Gilliam utilizó al máximo en "Parnassus".

"Por eso la elegí", dice Gilliam. "Tengo un instinto para ese tipo de cosas. Dios, esa es una criatura extraordinaria. Sin importar lo que pase, siempre la mirarás a ella", agrega.

Cole entrega un sorprendente pozo de ternura emocional a su rol de Valentina, la hija de un anciano artista callejero (Christopher Plummer como Parnassus) atrapado en una eterna batalla con Mr. Nick (Tom Waits), el diablo mismo. Mientras el cumpleaños 16 de Valentina se acerca, su padre trata desesperadamente de salvarla de las garras de Mr. Nick, incluso cuando sus propios afectos se dividen entre un misterioso estafador (Ledger) y un compañero del espectáculo (Andrew Garfield).

"Recuerdo especialmente la primera vez que leímos el guión entre todos. Estaba yo, Heath, Christopher, Andrew, Terry y el director de fotografía. Estaba en esa pieza y me di cuenta: 'Wow, esta gente es realmente talentosa y experimentada. Fue maravilloso estar ahí, pero me sentía completamente intimidada por la gente con la que tenía que actuar. Le dije eso a Terry antes de empezar, pero por alguna razón él confió en mí y tuvo el instinto para quererme en ese papel", dice Cole.

09 enero 2010

Nancy Meyers, la nueva mujer fuerte de Hollywood

Por 20 años, Nancy Meyers se mantuvo a la sombra de su esposo, el cineasta Charles Shyer ("El padre de la novia"). El pacto entre ambos era claro: los dos escribían sus películas, ella producía y él recibía todos los honores de director. "La verdad es que me estaba aburriendo la producción", dice Meyers, sentada en un salón del exclusivo hotel Ritz-Carlton de Manhattan. "Así que le dije: 'creo que yo dirigiré la siguiente'. Esa película era 'Juego de gemelas', que él desde un principio no quería dirigir", cuenta. Era 1998, año en el que -coincidencia o no- la pareja ya pasaba por una crisis que derivó en divorcio.

Desde entonces, Meyers no sólo se ha convertido en una de las mujeres directoras más importantes de Hollywood -con cintas como "Lo que ellas quieren", "Alguien tiene que ceder" y "El descanso"-, las cifras también le han dado el título de la más taquillera, superando a colegas como Penny Marshall ("Despertares") y Nora Ephron ("Julie & Julia"). Su nuevo éxito se llama "Enamorándome de mi ex", ya ha recaudado US$80 millones en el mundo.

En la cinta, Meryl Streep es una mujer divorciada hace 10 años (¿otra coincidencia?) que se divide entre un apasionado romance con su pícaro ex esposo (Alec Baldwin) y un arquitecto (Steve Martin) que le ofrece un cuento de hadas.

Muy relajada, e inesperadamente dispuesta a escarbar en sus sentimientos, Meyers asegura que sus guiones no son un reflejo exacto de sus experiencias ("No me gusta hacer documentales sobre mí, ¡qué aburrido!"), pero lo cierto es que sus películas suelen girar en torno a mujeres maduras y fuertes, algo poco común en la actualidad para las comedias románticas. "Es una locura que la gente asuma que cuando una mujer cumple 50 años su corazón se detiene o que deja de tener sexo. Es cierto, no se ve mucho en películas, pero sí en la vida", dice.

Ella continúa: "Yo creía que después de 'Alguien tiene que ceder' se iba a abrir el camino a más historias con mujeres fuertes, pero no fue así". Sin embargo, ella misma decidió retomar la tendencia con "Enamorándome de mi ex". Pero esta vez, en lugar de Diane Keaton, su musa es Streep: "Cuando escribí el papel pensé en ella, y obviamente cuando piensas en Meryl sabes que se trata de alguien brillante. Pero confieso que me sorprendió con lo potente que puede ser ella en comedia, ya que no ha hecho tantas en su carrera, porque la puse al lado de dos gigantes del género, que pueden hacer lo que quieran en pantalla. Y Meryl se impuso muy bien ante ellos".

Volviendo a sus sentimientos y a su inspiración, Meyers confiesa que ella y Shyer siguen siendo muy amigos ("Hablamos ayer", dice), pero que él le aseguró que no iría a ver la película: "Creo que teme sentir dardos lanzados en su dirección, aunque no es así. Se reiría mucho, sin duda, eso es seguro".

La reina de la comedia

Nancy Meyers produjo y escribió exitosas comedias, como "La pícara recluta", "¿Quién llamó a la cigüeña?" y "El padre de la novia" I y II.